El Yoga Nidra, conocido también como “sueño yóguico”, es una técnica ancestral de meditación y relajación profunda que busca llevar al practicante a un estado de conciencia entre la vigilia y el sueño.
A diferencia de otras prácticas de meditación, en el Yoga Nidra el practicante se encuentra en una posición reclinada, generalmente acostado sobre la espalda, lo que facilita alcanzar un estado de relajación profunda.
Sin embargo, esta práctica no es simplemente una forma de relajación, visualización guiada o ensueño. Es un estado específico de conciencia interna que permite experimentar un sueño profundo y sin sueños, conectando con el mundo interior y desconectándose del exterior.
Durante esta práctica, se logra un estado de sueño profundo en el que los sentidos, el intelecto y la mente se relajan, liberándonos de las nociones de tiempo, espacio y razón. Incluso, se ha mencionado que practicar una hora de Yoga Nidra puede equivaler al beneficio de cuatro horas de sueño convencional.
¿Cómo se practica el Yoga Nidra?
- Preparación del espacio: Es importante elegir un lugar tranquilo y libre de distracciones. Se puede usar un mat, tapete o colchoneta y, si es necesario, una almohada o cojín bajo la cabeza y una manta para cubrirse.
- Posición del cuerpo: El practicante debe acostarse boca arriba en la postura de Savasana, con las piernas y brazos ligeramente separados del cuerpo y las palmas de las manos hacia arriba. Es esencial estar cómodo para evitar movimientos durante la práctica.
- Intención o Sankalpa: Al inicio de la práctica, se establece una intención o Sankalpa, que es un deseo o propósito positivo y claro que se desea alcanzar. Esta intención se repite mentalmente varias veces.
- Rotación de la conciencia: El guía o instructor dirigirá la atención del practicante por diferentes partes del cuerpo en un orden específico. Durante este proceso, el practicante debe visualizar y sentir cada parte del cuerpo sin moverse.
- Visualizaciones y sensaciones: El instructor puede guiar al practicante a través de diferentes visualizaciones, imágenes o sensaciones. Esto puede incluir la sensación de pesadez o ligereza en el cuerpo, la percepción de diferentes colores o la visualización de paisajes.
- Regreso a la conciencia: Al finalizar la práctica, el instructor guiará al practicante de regreso a un estado de conciencia plena, recordándole su intención o Sankalpa y llevándolo gradualmente a la conciencia del entorno. Es importante tomarse unos minutos para moverse lentamente y reactivar poco a poco el cuerpo antes de incorporarse.
Beneficios del Yoga Nidra
Practicar Yoga Nidra regularmente puede ofrecer múltiples beneficios, como la reducción del estrés y la ansiedad, la mejora del sueño, el fortalecimiento del sistema inmunológico, y el aumento de la concentración y la creatividad. Además, al ser una práctica de introspección, puede ayudar en el proceso de autoconocimiento y crecimiento personal.
- Rejuvenecimiento del cuerpo: Durante la práctica, el cuerpo entra en un estado de relajación profunda, permitiendo la curación y el rejuvenecimiento. Las funciones corporales se minimizan, el metabolismo disminuye y se potencia la función hormonal, lo que facilita la eliminación de toxinas y la conservación de energía.
- Reducción del estrés: En la sociedad actual, el estrés es una constante. El Yoga Nidra permite liberar el estrés acumulado, llevando al sistema nervioso a un estado de calma y paz, lo que facilita la sanación y el rejuvenecimiento.
- Mejora de la concentración y memoria: La práctica regular mejora la capacidad de concentración y retención de información, ya que se trabaja en mantener la mente enfocada y en eliminar distracciones.
- Mejora de la respuesta del sistema nervioso autónomo (SNA): El SNA es esencial para diversas funciones corporales. A través del Yoga Nidra, se activa el sistema nervioso parasimpático, que es el encargado de la sanación, el crecimiento y la digestión, permitiendo una mejor regulación y respuesta del SNA.
El Yoga Nidra es una herramienta poderosa que va más allá de la simple relajación. Es una práctica que permite conectar con nuestro ser interno, liberar traumas y estrés, y guiar nuestra conciencia hacia un estado de paz y armonía.
Como mencionó Swami Satyananda, el Yoga Nidra es un estado en el que se es consciente de los campos conscientes, subconscientes e inconscientes de la mente, ofreciendo una terapia perfecta para el ser humano.